
TRADEINN ZARAUZKO TRIATLOIA
Sí, estoy escribiendo la crónica a las 12h de la noche, sentada en la cama porque soy incapaz de dormir. No sé si seré capaz de hacerlo mañana, ni pasado… ¡Guau! Es que estoy realmente emocionada. Ya lo estaba después de la carrera. Pero… el homenaje final… me ha descolocado por completo. Que bonito ha sido ¡Eskerrik asko!
No tengo palabras. Amo Zarautz. Vine por primera vez en 2015 y me enamoré a primera vista. Fue un flechazo. Es el triatlón en el que más veces he participado (ocho veces, consecutivas, si no fuera por el Covidy el embarazo). Es la única prueba a la que no he faltado ningún año; la única que para mí ha sido imprescindible y que no me quería perder por nada del mundo. Siempre he percibido que el sentimiento y el amor que siento por Zarautz, por esta carrera, por toda su gente, ha sido mutuo. Me lo han hecho saber todos siempre. Sin embargo, a pesar de ese gran amor recibido, para nada contaba con ese tremendo homenaje.
Eskerrik asko Zarauzko triatloia. Gracias Helene, por ser no solo partícipe sino la artífice de ello. Que bonito es que una deportista a la que admiras, una persona a la que quieres y una rival a la que respetas, te brinde semejante homenaje. Eso lo dice todo. Que grande eres. Que bonito ha sido compartirlo todo contigo. Estaré eternamente agradecida por este detalle. Y, cómo no: Gracias, Eider. No solo por leer lo que allí, delante de todo el mundo me leíste, sino, por escribirlo. Tus palabras me hicieron sentirme la persona más afortunada del mundo.
foto: @amari_erretratua
Uno de mis deportistas, ayer, antes de la carrera, me escribía: a por la txaplea. Pues me he traído la mejor que podía tener. Una única y exclusiva. Hecha para mí y con todo el cariño del mundo. ¡Precioso!
Os debería hablar de cómo ha ido la carrera, pero de verás que os puedo contar muy poco. Además, yo misma me doy cuenta, horas después, que no he mirado ni una sola vez el reloj, en ningún sector; en ningún momento de la carrera. No tengo recuerdos de haber sufrido, ni de haber dudado. Ni siquiera de haber competido. Me doy cuenta de que he estado en una nube prácticamente durante toda la carrera. Absorta en mis pensamientos, disfrutando de la carrera de principio a fin, recordando tantos momentos especiales que he vivido durante todos estos años. Me he dejado llevar por los ánimos y los gritos continuos. Me he dejado llevar por cada cara conocida, por cada persona que gritaba mi nombre o mi apellido, por los ánimos de todos los corredores que me pasaban o coincidían conmigo. Se me ha pasado la carrera sin darme cuenta, de verdad, ahora es cuando soy consciente de ello.
La subida al infierno ha sido muy emocionante. No he sido capaz de contener las lágrimas. No podía respirar por culpa de la emoción y he temido por no poder completar el muro. Suerte que siempre hay una mano salvadora que te da la vida, y si encima va acompañada de una frase bonita mejor que mejor. ¡Muchas gracias!
foto: @cristiancruiz23
Me pedíais que disfrutara, y os aseguro que no he podido disfrutarlo más.
foto: @cristiancruiz23
Qué bonito es sentir que la gente ha entendido en qué momento estoy. Sentir que saben cuál es mi prioridad y cuál es mi nueva forma de competir ahora. Sentir que respetan mi decisión y empatizan con lo que siento y con lo que ahora quiero.
Y me siento feliz de haberlo entendido yo también. Y de haber conseguido llevarlo a cabo ya en esta carrera. Me siento feliz de haber estado el viernes jugando con mi hija en la playa y en el parque sin parar. Y de haber disfrutado de Zarautz durante los días previos. Cosa que nunca antes había podido hacer. Y que los abuelos se marcharan a pasar el día a Getaria y Zumaia, sin estar pendiente de mí y de Haru, para que yo descansara. Y de que Javi pudiera hacer su ruta de trail de rigor, sin remordimientos. Y que él también tuviera su espacio, y su momento.
Bici de ruta:
No podía quedarme con la cosa de no saber cómo sería este tri con bici de ruta en vez de con cabra. Y, si había un año para comprobarlo, debía ser este. No quiero que parezca que no venía a competir, a darlo todo, como siempre, y poner todo de mi parte. Y aunque es cierto que me ha podido penalizar en cuanto al crono, siento que he tomado la decisión correcta y acertada al venir con esta bici. Era una cuestión de confianza, de seguridad en mí misma y, eso, está por encima de la lucha contra el tiempo. No solo ha sido un acierto –con el día que hemos tenido de lluvia–, sino que cada año me condicionaba mucho el miedo a no ser capaz de subir el muro con la cabra, no solo por la poca destreza que tengo con ella, a pesar de llevar un buen desarrollo, sino que me condiciona mucho los nervios, me bloqueo, me tiemblan las piernas y entro en pánico. Y este año no quería sentir eso. Sabía que con la bici de ruta eso no iba a pasar y así ha sido. Así que me alegro por ello.
foto: @aitorandonegi
La anécdota:
Anecdótico que el viernes por la mañana cuando iba a la playa con mi niña me viniesen a hacer una entrevista. No sobre el triatlón, ni mucho menos, sino sobre cómo cocino la merluza. Era una televisión local que hablaba de cocina. Surrealista. Claro, los triatletas me miraban como: “claro, es Judith Corachán. Estará hablando sobre la carrera”. Jejeje
foto: @cristiancruiz23
Qué bonito ha sido defender el título tan honorable que me otorgasteis hace años con tanto cariño: “La reina del norte”. Vaya regalo. Son palabras mayores. Ha sido uno de los mayores privilegios de mi carrera deportiva. Lo he llevado con mucho cariño y respeto. Permitirme conservarlo con mucho orgullo, aunque ahora sea el momento de pasar el testigo, el legado deba continuar.
Gracias a Iña e Itsaso por desviviros conmigo y mi familia desde que llegamos el jueves a Bilbao y hasta que nos marchamos el domingo de vuelta a casa. Lo mejor ha sido poder pasar tanto tiempo juntos.
… ¡Uf! Días después… Aún sigo muy emocionada. Tengo el gran privilegio de haber sido homenajeada en el mejor triatlón de España (y me atrevo a decir que del mundo entero), esto es la meca del tri. Gracias de nuevo a la organización y a todas las personas que hay detrás de esa despedida tan bonita. Por el detallazo de la txapela personalizada y por el cuadro (gracias a la artista, me ha encantado). Y qué bonito que fuera narrada por Aitor y Jon Alegría. Zarautz es llegar a boxes y veros a los dos, saludaros, abrazaros y ya llenarme de energía cada vez que paso por donde estáis, en cada paso por vuelta, en la meta…Me encanta.
(«En nombre del pueblo: Muchas Gracias»)
Quiero volver a Zarautz, quiero volver al Txikipolit. Como mola la sensación de aparecer por allí año tras año y encontrarme con los de siempre y que me hagáis sentir como en casa. A mí y a Javi. Quiero volver a pisar vuestras calles y reencontrarme con vosotros.
Gracias a los fotógrafos por todas las fotos. No son solo de mucha calidad sino que vosotros sois calidad humana.